Paradojas del miedo
La presentación de un libro es lo más importante, si de referencias para el lector hablamos, creo que lamentablemente el presentador que eligieron, no fue el adecuado para la ocasión, llamaba la atención ver que no sabia los nombres de los expositores, mientras cada uno de ellos hablaban el pretendía dormir, transmitió aburrimiento y devaluó el trabajo de los ponentes.
El primer expositor, Ricardo Romo, con todo respeto fue tedioso, no se vale que si tu contribuyes a la elaboración de algo en especifico, estés leyendo cada uno de tus comentarios, creas confusión, y tornas el dialogo monótono.
No todo fue malo, los siguientes expositores, lograron dar en el clavo, presentando situaciones que se viven día a día, y que contribuyen a desencadenar eso a lo que llamamos miedo.
Velocidad de la exposición: fue regular, por lo que comentaba anteriormente, el presentador no contribuyo del todo para que la secuencia fuera adecuada al tiempo.
Claridad de las ideas: en su mayoría plasmaron lo que se pretendía.
Formas de argumentar para convencer que se trata de un libro con determinadas características: se cumplió en su totalidad el cometido.
Interés que causa en ti cada una de las cuatro exposiciones: dos de las cuatro, crearon en mí ese interés no solo por adquirir el libro, adquirir conocimiento acerca del tema.
Con mi opinión general, describiré las preguntas faltantes; falto organización, y mucha atención de parte de algunos de los expositores, no solo hacia el publico, sino entre ellos, se percibió esa falta de interés, el nombre del libro es muy bueno, y me di cuenta porque asistieron compañeros de semestres superiores, sin compromiso escolar, es decir voluntariamente, me comentaban que se escuchaba interesante, eso es un punto a favor de las personas interesadas en su difucion.
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