Para entender totalmente este tema tenemos que dejar claro
qué es género porque muchas veces se suele pensar que sexo y género es lo mismo
y de ninguna manera lo son.
Al definir estas dos
palabras, algunas entidades como la ONU o Fundación Mujeres coinciden en que
sexo es: “el conjunto de características físicas, biológicas, anatómicas, y
fisiológicas de los seres humanos, que los define como hombre y mujer. El sexo
viene determinado por la naturaleza, es una construcción natural, con la que se
nace. Mientras que género es: “el conjunto de características sociales,
culturales, políticas, psicológicas, jurídicas y económicas que la sociedad
asigna a las personas de forma diferenciada como propias de hombres y mujeres.
Los géneros son construcciones socioculturales que varían a través de la
historia y se refieren a los rasgos psicológicos y culturales que la sociedad
atribuye a lo que considera “masculino” o “femenino” mediante la educación, el
uso de lenguaje, la familia, las instituciones o la religión.
Entonces la diferencia entre género y sexo es que con uno se
nace y el otro se adquiere.
Ya habiendo definido estas dos palabras y teniendo claro lo
que es género, pasaremos a hablar sobre qué es Igualdad de género. Según el
Instituto de las mujeres de la ciudad de México es: “El acceso de las mujeres y los hombres al mismo trato y oportunidades
para el reconocimiento, goce y ejercicio de los derechos humanos. La igualdad de género tiene
su base en la equidad, la cual propone tomar en cuenta las diferencias entre
las personas para conseguir la igualdad de oportunidades para mujeres y hombres
en todos los ámbitos”.
Así que al hablar
de Igualdad de género no hay que confundirnos y pensar que es algo por lo que
únicamente pelean las mujeres y en beneficio de ellas mismas porque luego
terminamos pensando en feminismo y estas mujeres revolucionarias que quieren
derrocar al patriarcado. Y bueno es normal que nuestra mente nos muestre este
tipo de imágenes e ideas porque algo que últimamente está tomando mucha fuerza
es la guerra de sexos. La guerra entre el machismo y el feminismo, cada uno
tratando de hacer entender al otro bando porque las cosas deben quedarse como
están o deben ser cambiadas. Pero ese es un tema del que hablaré más adelante,
primero se me hace importante aclarar las causas que a lo largo del tiempo han
provocado este desequilibrio entre los hombres y las mujeres, los cuales se
buscan cambiar porque muchos piensan que ya estuvo bueno de tanta ideología
conservadora.
Roles y estereotipos de género.
En cuanto a la
definición de roles de género es: El conjunto de deberes,
prohibiciones y expectativas acerca de los comportamientos y actividades
considerados socialmente apropiados para las personas que poseen un sexo
determinado.
Los roles de género están como están porque se han mantenido
tanto tiempo así que la gente piensa que ya es algo natural. Que es normal y
necesario que la mujer se dedique al hogar y el hombre sea el que salga a buscar
el pan de cada día para traerlo a casa.
¿Qué es lo que se necesita para que estos roles y
estereotipos desaparezcan? Sólo una sencilla cosa, que es dejar de intentar
etiquetar a las personas como si fueran cosas. Este gran error que todos
cometemos diariamente. Queremos que todos sean o se comporte de una manera en específica
de acorde a su sexo, género, vestimenta, generalmente hablando. Queremos
etiquetar a alguien que cambia diariamente. Simplemente con recordar cómo nos
comportábamos y vestíamos hace 5 años, nos damos cuenta de lo tonto que es
intentar ponerle una etiqueta de por vida a una persona.
Una cosa es saber y otra darse cuenta. Sabemos que seguimos
un patrón, que marchamos al paso que nos marca la sociedad, pero no nos damos
cuenta de los problemas que esto provoca, no nos damos cuenta que siguiendo
esto nos estamos limitando nosotros mismos. Nosotros mismos ponemos topes y
restricciones para sentirnos libres y todo, ¿para qué? Para agradar y evitar
sentirnos señalados por salirnos del contexto donde nosotros mismos nos hemos
colocado.
No se nace con un rol, se aprende y varía dependiendo del
lugar donde estemos.
Si hablamos de los países occidentales, los roles se inculcan
desde el momento en el que nacemos. Si eres mujer te toca el rosa y si eres
hombre el azul. Vienen tus primeros regalos y a las niñas se les convierte en
una especie de mamá chiquita con estos nenucos, carreolas de juguete y todo lo
necesario para que se vaya acostumbrando a la vida que la sociedad espera que
tenga cuando sea una mujer adulta. Por otro lado al niño le tocan las
herramientas de juguete, carritos y demás. Entonces ya teniendo al papá
chiquito y a la mamá chiquita lo dejamos que ellos sigan eligiendo sus juguetes
porque ya los encaminamos más o menos a lo que tienen que elegir.
Guerra de sexos.
Ya habiendo hablado un poco sobre la Igualdad, los roles y
estereotipos de género vamos a seguir con algo que se ha desatado a causa de
esta creciente búsqueda por la igualdad y el intento de ir en contra de todas estas
reglas y normas sociales donde el hombre y la mujer tienen bien marcado su
papel en la sociedad. La consecuencia a todos estos movimientos sociales es una
guerra de sexos, los hombres contra las mujeres y no sólo entre ellos, sino
entre las mismas mujeres y hombres que creen que las cosas deben de permanecer
como están. Las mujeres que creen que es más conveniente para ellas seguir
siendo tratadas delicadamente, dedicándose al cuidado del hogar y los hijos,
cosa que no está mal porque cada quien se queda donde mejor le acomoda, mientras
que por otro lado están aquellas mujeres que no les importa nada de esto con
tal de tener un trato igualitario ante a la sociedad. Y entre los hombres donde
unos piensan que el lugar de la mujer es bajo su protección y cerca donde la
puedan vigilar, y otros creen que ya es hora de que ellas también le entren al
ruedo y tengan libertad de elegir a donde quieren pertenecer.
Hay mujeres que aprovechándose de este movimiento a favor de
la Igualdad de género no piden igualdad sino desigualdad. Dicen que ya estuvo
bien de que los hombres sean los privilegiados y que ahora les toca a las
mujeres ser el sexo fuerte. Y siendo sinceras muchas mujeres somos medio
chantajistas al momento de pedir cosas, nos victimizamos tratando de ganar la
simpatía de la gente para obtener lo que exigimos. Pero también hay hombres que
simplemente no soportan no poder mostrar su virilidad y no tener a alguien a
quien proteger e imponerse para sentirse hombres de verdad. Se dice que para
mentir se necesitan a dos personas, una que diga la mentira y otra que se la
crea. Bueno, es igual en el machismo, se necesita de un hombre que se crea
superior y una mujer que se lo crea. Y aquí es donde entra esta guerra de
sexos, donde se pierde la búsqueda por una igualdad de oportunidades y la
libertad de poder elegir sin ser señalados por salirse de lo establecido, para
entrar en una batalla campal de quién es más y por lo tanto merece más.
¿De verdad creen que se logrará una igualdad si hombres y
mujeres pelean cada uno arriba de su propio pedestal y se niegan a bajar? No se
habla, se discute y “los zapatos a la fuerza no entran”. Primero que todo
tenemos que quitarnos este papel de víctima y dominante, y créanme que todo lo
demás se dará naturalmente.
Entonces, ¿qué es lo que realmente queremos?
Se pelea por una igualdad difusa, la simple palabra igualdad
ha perdido su significado. Démonos cuenta que la Igualdad de género es un paso
para la libertad de que el hombre y la mujer se puedan expresar libremente
tanto emocional como estilísticamente. Hablemos, no discutamos. Tratemos de
convencer a la gente de adoptar esta idea, no la queramos imponer. Debemos de
hacerle ver a las personas los beneficios que traerá la Igualdad de género, que
no solo beneficia a un tipo de persona, sino que todos salimos ganando. Dicen
que antes de cambiar el mundo debemos empezar por nosotros. Entonces hagamos
eso. Que esto se convierta en un modelo a seguir.
Para las personas hoy en día les es más fácil seguir una moda
que un estilo de vida duradero y esto lo podemos utilizar a nuestro favor,
tratemos de llegar a la gente por este medio, convirtiéndolo en una moda y
puede ser que con esto la gente se dé cuenta de lo beneficioso que puede llegar
a ser esto si se decide por convertirlo en un estilo de vida.
Y dejemos en claro que se busca la Igualdad de género como
paso a la libertad de elegir.
Bibliografía.
Consultados el 19 de
noviembre de 2015.
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